jueves, 31 de enero de 2019

Los pueblos inundados por el embalse de Úzquiza

Aunque es un caso menos conocido que el producido por otros pantanos, también el embalse de Úzquiza, el principal suministro de agua potable de Burgos, guarda bajo sus aguas los restos de, no uno, sino de hasta tres pueblos. Pude comprobarlo con mis propios ojos en el excepcionalmente seco otoño de 2017.

El primero de los pueblos es el que da nombre al embalse; Uzquiza. Era el más cercano a la actual presa, casi en la vertical del pequeño portillo de “El Matorro”. Como los otros dos pueblos, fue reducido a escombros tras el abandono definitivo. Y por ello sus restos son muy escasos. 

Restos del pueblo de Úzquiza. Al fondo se aprecia la presa del embalse.

Foto tomada del libro "Amo mi pueblo". Parte de esta espadaña, conservada por la CHD, será colocada en el memorial de los pueblos del embalse.

Los otros dos pueblos, Herramel y Villorobe, se encontraban en el entorno de la zona en la que el río gira para tomar dirección oeste. Estaban tan cercanos que, en cierta manera, el primero podía pasar como barrio del segundo; Villorobe, que aún contaba con 200 habitantes en 1970, apenas quince años antes de la expropiación. No es el caso de Herramel, cuya iglesia ya estaba arruinada por aquellos años.

Restos del pueblo de Herramel y puentes que lo comunicaban con el cercano Villorobe

Villorobe tenía también el privilegio de contar en su iglesia con una excepcional cruz procesional altomedieval, pieza que hoy puede contemplarse en el museo del retablo. Tambien acabaron en iglesia de la capital, que sepamos, uno de sus retablos y la pila bautismal románica. Villorobe era la cabeza de un municipio que se componía de estos tres pueblos.

Cruz de Villorobe; custodiada en el Museo del Retablo.

“Úzquiza, Herramel, Villorobe y Alarcia, los cuatro pueblos de la desgracia”. Un dicho inmemorial que se conocía en la zona y que resultó tristemente profético ya que hoy en día de estos cuatro pueblos sólo existe el último. Fue en 1985 cuando los últimos habitantes de estos pueblos fueron obligados a abandonar sus hogares.

Puente de "La Herrán"; a la entrada al pueblo de Villorobe

Pero tuvieron que ser realmente duros y tristes esos últimos años en estos lugares cuando ya estaban condenados y las obras de la presa progresaban poco a poco. Sorprende por ello lo serenas que son las declaraciones de los “exiliados” del pantano; asumiendo el abandono como algo necesario en pro de un bien mayor. Tristes, pero serenas, puro carácter castellano. Así se ve en este revelador vídeo.


El antes y el ahora de Villorobe; aproximadamente desde el mismo punto. (Foto histórica de Alberto Rodrigo).

Hace unos días salía en la prensa una noticia relativa al adecentamiento del lugar en el que se depositaron los restos de los cementerios de los tres pueblos, para que los allegados puedan visitarlos en condiciones dignas. El sitio se convertirá también en un memorial de estas tres localidades; incluyendo algunos elementos constructivos de los mismos como la espadaña de la iglesia de Úzquiza.

El embalse de Úzquiza, también conocido como segundo embalse del Arlanzón, forma parte ineludible del paisaje de la cuenca alta de dicho río. Fué inaugurado a finales de los años 80 y tiene como peculiaridad su presa del tipo de "materiales sueltos", que favorece una mayor integración en el paisaje.

Fue diseñado por los ingenieros Enrique Jiménez y Juan Benet, este último también conocido por su actividad escritora. En la construcción del dique de contención se emplearon las más innovadoras técnicas y diseños de la ingeniería de la época y se sustituyó la clásica obra de hormigón por la tierra, arcilla y roca compactada.

El dique tiene una altura de 59 metros y una longitud de coronación de 460. Junto a la presa se levanta la espectacular torre que sirve para captar el agua que se consume en Burgos, tras pasar por la potabilizadora de Arlanzón. Las aguas retenidas en el pantano de Uzquiza alcanzan una capacidad máxima de 75 hm3 y se utilizan también para el regadío. El pantano ocupa una superficie total de 313 hectáreas y cuenta con poco más de 21 km de longitud de costa.

5 comentarios:

Amador dijo...

Hola Montacedo , no recuerdo como eran Uzquiza y Villorobe , pero si me acuerdo de los bocadillos de chorizo y salchichon que nos ponia el cantinero de Villorobe cuando ibamos en bicicleta a bañarnos al pantano del Arlanzon en los años 1976 y 77 . Un saludo .

Montacedo dijo...

Gracias por dejarnos este apunte del pasado

Miguel dijo...

Ha rebasado alguna vez su capacidad?

Alonso dijo...

Recuerdo perfectamente los tres pueblos. Durante los ochenta era muy común que varios amigos hiciésemos en bicicleta el recorrido desde Burgos hasta el viejo embalse y vuelta. Úzquiza tenía una generosa fuente al borde de la carretera con agua fresquísima y abundante todo el año. Hoy sigo teniendo el agua de aquella fuente por la mejor que he bebido en mi vida. Tomada la desviación a la derecha para coger la carretera que sube a Pineda (de seguir recto, como hoy, se llegaba a Alarcia y a Pradoluengo), en seguida nos topábamos con Villorobe y se atravesaba un puente de piedra sobre el Arlanzón. Después he seguido subiendo a menudo en bicicleta al viejo embalse, ya por la carretera nueva, por el puerto de El Matorro, y recordando siempre la que en mi memoria quedó como la vieja ruta.

Montacedo dijo...

Muchas gracias por dejarnos aquí este recuerdo esperamos que grato.