miércoles, 25 de septiembre de 2019

Casa-fuerte de Cavia

De la casa fuerte de los Rojas en Cavia o Cabia (el lugar recuperó su denominación antigua hace unos años) ya hablamos hace un tiempo al describir la historia del antiguo castillo de Muñó


El edificio, muy transformado, sigue ennoblecido por los escudos con el blasón de las cinco estrellas de los Rojas, estampados en la parte alta del muro frontal, blasón repetido en cada unos de los cubos que la flanquean.


En vida de doña María Enríquez, hacia 1453, viuda del señor don Juan de Rojas, alcalde Mayor de los hijosdalgos de Castilla e hijo de Martín Sánchez de Rojas (muerto por los moros en la batalla de Callejares en 1406) la casa fortaleza ya tenía alcalde.


Por el año 1496, Gonzalo de Villegas era alcalde del lugar de Cavia “por el honrado y noble caballero Sancho de Rojas (hijo del anterior) señor del dicho lugar e alcalde mayor de los fijosdalgo destos reynos de Castilla”.

Don Sancho, personaje de alta significación, era pariente por su mujer de la Reina Católica. Ello le valió el perdón por el cerco del castillo de Burgos en 1476, si bien fue severamente amonestado por la soberana. El objeto era acrecentar los derechos de portazgo en el puente de Buniel sobre el Arlanzón. En 1774 la casa-fuerte o fortaleza pertenecía al conde de Altamira, destinada en su ocaso para custodiar granos.

Según la tradición en el cuarto de las rejas (cuya ventana se aprecia en la imagen) también pernoctó Juana La Loca.

Recientemente (en 2015) este castillo ha sido adquirido por un empresario burgalés que lo está rehabilitando para transformarlo en un hotel rural.

jueves, 19 de septiembre de 2019

Castillo de Mazuelo de Muñó

Muñó fue en época medieval lugar de señores y fortalezas, debido a su estratégica ubicación muy cercana a Burgos y a los caminos de Madrid y Valladolid. 


De los castillos de aquella época seguramente el mejor conservado de la zona, y uno de los más destacados de la provincia, es el de Mazuelo de Muñó.


El responsable de la construcción de su torre fue tal un Pero Carrillo, merino mayor de Burgos, que la comenzó a edificar a mediados del siglo XIV. En 1466, Mencía Carrillo la vendió a los Rojas, que a su vez, 80 años después, se la traspasaron al canónigo y chantre de la catedral de Burgos: Andrés Ortega Cerezo. Al final acabó siendo propiedad de los marqueses de la Rosa. 


El castillo se alza sobre un cerro que preside el caserío del pueblo y la fértil vega del arroyo del Mazuelo. La construcción es imponente por sus dimensiones y altura y por la calidad de los materiales utilizados en su fábrica. 


La fortaleza consta de una torre gótica rodeada, en tres de sus lados, por un recinto amurallado que es posterior, siglo XVI, y que denota un aire totalmente renacentista. En su frente principal luce una barbacana, con dos cubos en sus esquinas, que protege el arco de medio punto de la entrada. 

La torre del homenaje es de planta cuadrada, tiene cuatro pisos y está coronada por una triple hilera de ménsulas, sobre las que descansa un matacán con almenas caladas alternantes. Entre los vanos que se abren en sus recios lienzos destacan varias ventanas ajimezadas, con arcos de medio punto y sus correspondientes asientos interiores labrados en la pared. 


Sorprende encontrar en este pueblo entre las casas los restos difuminados de un edificio de corte eclesiástico del que no he logrado encontrar ninguna información.







martes, 17 de septiembre de 2019

Torre de Arenillas de Muñó

A tiro de piedra de Mazuelo de Muñó se encuentra la torre de Arenillas de Muñó, de hecho se ve perfectamente una torre desde la otra.




Fueron los Padilla los que levantaron esta fortificación a mediados del siglo XV. Su torre del homenaje es de planta cuadrada, tiene unos 18 metros de altura y está rematada por una corona de matacanes sobre la que se levanta un parapeto almenado. En sus gruesos muros de sillarejo se abren varias rasgaduras verticales para tiro de ballesta y unas cuantas troneras para fusilería de pequeño calibre. 



Si bien la torre se conserva razonablemente bien (al menos exteriormente) apenas se intuye hoy en día la cerca rectangular que formaba junto a la torre un amplio patio de armas. Antes de pasar a manos de los duques de Abrantes, el más ilustre propietario del castillo de Arenillas de Muñó fue don Gutierre López de Padilla, mayordomo del rey Felipe II. 


miércoles, 4 de septiembre de 2019

Criales de Losa

Dejamos la poco poblada parte central de Losa para acercarnos al curso del río Jerea, a cuya vera los pueblos tienen algo más de vitalidad. De hecho, Criales es uno de los pueblos de mayor entidad, pese a que no llega a la cincuentena de habitantes, lo que se aprecia en un tamaño relativamente considerable y en un aspecto más "urbano".


Algunos colectivos relacionan el nombre de Criales con la leyenda del "Santo Grial" que emana del peculiar foto espiritual de la cercana ermita de San Pantaleón. En todo caso el principal motivo de nuestra parada en Criales es "echar un vistazo" a su parroquial de Nuestra Señora de las Nieves. Como vemos, su estructura general obedece a una reforma bastante moderna.


La fachada de entrada está ocupada por una portada de periodo neorománico y está culminada por una serie de canecillos del gótico temprano formados a base de cabezas antropomorfas.












Pero sin duda el elemento más interesante es su ábside románico y, más en concreto, la espectacular ventana de doble cuerpo de columnas con sus respectivos capiteles.







En el interior de la casa concejo de Criales se encuentra una exposición, a base de paneles informativos, en la que se explica todo lo referente a la milenaria y amenazada raza del caballo losino. Se puede visitar localizando al alcalde.



Por cierto, durante unos cuantos años, a finales de agosto o principios de septiembre, se ha venido celebrando en Criales de Losa una animada feria dedicada a este animal (podéis ver este reportaje del amigo Zález para saber más).

Desde hace unos años la feria ha sufrido variaciones en cuanto a periodicidad y lugar de celebración. Las siguientes fotos corresponden a la edición celebrada en Criales en 2018.