La surgencia de Covalagua es la
más importante vía de salida de las aguas que se filtran en el páramo de la
Lora; pero no la única. A tan sólo tres kilómetros en línea recta, y ya en
terreno burgalés, se localiza otra caudalosa surgencia (prácticamente
desconocida) que también forma bonitas, aunque más humildes, cascadas. Recibe
el nombre de Fuente de la Cueva.
Como se puede apreciar en las
imágenes, la cueva está cerrada con una verja y de la misma sale una tubería.
Ello parece indicarnos que el pueblo de Villaescobedo (que es el que más
cercano se encuentra) se surte de estas aguas.
Aunque el lugar está apartado,
sorprende que hasta el año 2010 no se realizase una exploración en profundidad
de la cueva. Durante la misma se llegó casi a los cuatro kilómetros de longitud
total, con posibilidades de ampliación.
Las aguas que surgen de la cueva
nutren al arroyo de Mundilla, que, ya unido al Valtierra, vuelve a sumergirse
en el páramo en la Cueva de Basconcillos para surgir poco después por la
Cueva del Moro y el Pozo Verde. A partir de este punto todas estas aguas
pasan a llamarse río Rudrón.
Como último dato curioso,
mencionaremos que la Fuente de la Cueva de Villaescobedo se encuentra a menos
de un kilómetro del trifinium en el que se juntan las provincias de Cantabria,
Palencia y Burgos.
Para más información podéis
consultar esta página web.
3 comentarios:
El Rudrón, se podría decir entonces que es como el Guadiana, pero en burgalés...
Interesante...
Resulta que he estado en la cueva de los franceses y no en la cascada, vaya fallo. Aunque lo cierto es que creo que no era época de cascadas. Tal y como nieva estos días, en unas semanas supongo que las caidas de agua estarán a tope. Habrá que hacer una visita.
Sí, yo he estado en verano y la verdad es que el sitio está un poco tristón. Seguro que este año estará tirando agua muchas semanas.
Publicar un comentario