Paisajes de Guerrilla (IV): Escenarios de las operaciones de Francisco de Longa (primera parte)

Tal y como apuntábamos en el anterior artículo, aunque las operaciones principales de Longa se efectuaban en los caminos de Burgos a Vitoria y Bilbao, buena parte de las razones de éxito radicaron en su conocimiento de la complicada orografía del norte burgalés. Ello le permitía escapar siempre de sus perseguidores e incluso asestarles sorpresivos zarpazos. En las próximas imágenes mostramos algunos de los paisajes y lugares que fueron testigos de estas actuaciones; una excelente escusa para recorrer estos emplazamientos.



Calle principal de La Puebla de Arganzón; adaptada a su secular carácter de lugar de paso hacia Francia.

En una herrería de este pueblo trabajaba Longa cuando comenzó la Guerra de la Independencia. Al cabo de unos meses está a punto de ser capturado almacenando armas para la resistencia. Tal vez el continuo tránsito de tropas invasoras tuvo alguna relación con su conversión en guerrillero.

 

(izq) Villafría de San Zadornil visto desde Revillallanos. (der) hoz de acceso a San Zadornil vista desde la torre de su iglesia.

Marzo de 1810. Informados los franceses de que Longa se refugiaba en el pueblo de Villafría de San Zadornil, acude allí una pequeña partida. Camino del lugar los franceses son emboscados en la hoz de acceso al pueblo de San Zadornil. Se causan 22 bajas obligando a la tropa a retirarse hacia Miranda.

Calzada medieval de ascenso al páramo desde El Almiñé

Abril de 1810. Los franceses volvían a Burgos después de recaudar las contribuciones de Villarcayo y Medina. En el viaje de vuelta Longa les atacó en la subida del camino medieval de El Almiñé. Los franceses lograron salvar la recaudación repartiéndola entre los soldados, aunque dejaron tras de sí unos 50 muertos.

Puente medieval de Frías, con su iglesia al fondo

Abril de 2010. Desde el puente de Frías hace frente a una partida de 150 hombres en su busca. Combate una tarde entera hasta que comprueba que el enemigo está a punto de recibir refuerzos. En este momento se retira de forma ordenada dispersando a sus tropas por los montes. Los franceses perdieron 100 hombres y los guerrilleros unos 25.

 

Restos del Monasterio de la Hoz, en las cercanías de Cillaperlata. Foto cedida por Miguel Zález.

En 1810 este pequeño monasterio del que hablamos en otro artículo, ya en franco declive, es saqueado por las tropas de Longa en castigo por supuesto colaboracionismo con los franceses.

  

(izq) Castillo de Monasterio de Rodilla (der) desfiladero de Pancorbo

Tras varios meses en los que consigue escaparse continuamente de operaciones que intentan capturarle; decide sorprender atacando más al sur, en el camino entre Burgos a Miranda. En una de ellas el objetivo es capturar a un general francés. Primeramente la caballería hizo un ataque de despiste en la zona de Monasterio de Rodilla y luego se retiró hacia montes de Oca.  La infantería guerrillera se dividió en 3 partes, de modo que dos de ellas encerraban a la columna en el desfiladero de Pancorbo y la tercera procedía al ataque. La llegada de refuerzos consiguió evitar la aniquilación total, pero el general resultó herido y los guerrilleros se llevaron su carruaje.

 

Portillo de Breña en los montes de Ordunte, paso tradicional hacia Carranza.

El mando francés reaccionaría con un potente ataque, con más de 2000 hombres, contra los dos cuerpos de Longa, que se prolongaría más de un mes. La infantería fue perseguida por Poza y Frías, siendo casi alcanzada en Villasana de Mena. Para huir de la situación sus miembros huyeron por la noche al bosque dispersándose por las montañas de Ordunte y pasando hacia Carranza.

Vista del valle de San Vicente desde los Montes de Ayega

Por su parte la caballería, dentro de la misma operación, también era perseguida. Los franceses estuvieron a punto de encerrarle en los Montes de Oca (hubo un breve enfrentamiento en Santa Cruz del Valle Urbión), pero logró escapar por el valle de San Vicente hacia los Montes de Ayega, burlando los destacamentos de Ezcaray y Belorado.

 

(sup) Padrones de Bureba (cen) Huidobro (aba) Paso de los Tornos

Semanas después, a la altura de Poza de la Sal fue de nuevo localizado. Longa huyó siguiendo una complicada ruta pasando por Padrones, Huidobro, Tudanca, Valle de Arreba y Soncillo, dispersando a sus hombres con la instrucción de reunirse en Montejo de Bricia, donde por fin pudieron descansar.



Sierra de Arcena vista desde las laderas del Humión, con San Martín de Don en el fondo del valle.



A finales de abril de 1811 Longa se encuentra en Oña donde es de nuevo localizado y acosado por una columna de 700 jinetes. Longa se sitúa en las zonas altas y al caer la noche huye por los montes hacia el puente de Frías y Montejo de San Miguel. Al amanecer se reúne con su infantería en el monte de San Martín de Don, fácil de defender. Los enemigos, al llegar al pueblo y ver la dificultad del ataque, permanecen en posición de espera. La infantería de Longa se refugió con frecuencia en estos montes después realizar operaciones en el camino a Bilbao por el puerto de Orduña. La caballería, debido a su mayor agilidad, podía huir rápidamente por los valles de Losa y Mena.

 

Valle de Relloso desde el túnel de la Complacera

Como continuación de la anterior operación, Longa pasa por los montes hacia Berberana y divide a su tropa en tres fracciones. Una se refugia en Monte Santiago, otra llega hasta Castrobarto en donde se une con los restos de la infantería y la tercera, que dirige el mismo, se ubica en Relloso. Esta tercera era aparentemente la más fácil de sorprender, y efectivamente está a punto de ser  acorralada por los franceses. Afortunadamente unos paisanos les indican los pasos por Peña Complacera para bajar al Valle de Mena (entonces no existía el peculiar túnel) tras lo cual los perseguidores acaban desistiendo de su operación de captura.

 (Continuará en el siguiente artículo)