lunes, 28 de abril de 2014

Árboles singulares: la Dehesa de Palacios de la Sierra

A unos tres kilómetros al sur de Palacios de la Sierra, siguiendo la carretera que se dirige a San Leonardo de Yagüe, se encuentra un interesante espacio adehesado a base de robles (Quercus Petraea) y amplias praderas. Podemos acercarnos al mismo siguiendo el sendero de pequeño recorrido PRC-BU-7, Pinares de Urbión.
 

 
 
Siguiendo el mismo a lo largo del camino forestal "El Cerro", llegaremos, tras algo menos de dos kilómetros, a la ubicación de un árbol monumental bien señalizado y con cartel explicativo.
 
 

El ejemplar tiene un perímetro cercano a los 6 metros y una altura de 22 metros. Su edad se puede estimar en unos 500 años.


 Este roble y sobre todo esta dehesa son tratados en profundidad en el libro "árboles singulares de la provincia de Burgos", un libro que (reitero) merece muy mucho la lectura. En el mismo podremos conocer (entre otros muchos datos) que, al parecer, esta dehesa fue propiedad originalmente de los monjes de Santo Domingo de Silos, que debieron edificar su monasterio en el emplazamiento de la desaparecida ermita de San Miguel, cuyas ruinas aún pueden verse a la entrada de la dehesa.
 
 
La creencia popular se asienta sobre el supuesto hecho de que parte de los robles más antiguos crecen en hilera, lo que sustentaría la hipótesis de que fueron plantados hace siglos por los monjes. Yo por mi parte no puedo ni afirmar ni desmentir esta afirmación.

 
 
Muy cerca de San Miguel se encuentra una fuente rústica denominada Fuente Cardosa sobre la cual también existe una bonita leyenda. Según esta historia en los primeros tiempos de la reconquista una mora había dado a luz muy cerca de esta fuente pero no conseguía que le bajase la leche. Desesperada pidió ayuda a una cristiana que por allí pasaba, y que a la sazón estaba criando, la cual le hizo el favor de amamantar a la criatura. Como agradecimiento la morita le regaló unas cardas de oro (de ahí el nombre de la fuente).
 
 
Según el libro, la calidad de la madera de estos robles era tan alta que, frente al tradicional respeto a estas masas comunales, aquí todos los años se cortaban 25 de sus mejores árboles. Con estos robles se hacían toneles muy apreciados por los bodegueros jerezanos para envejecer en ellos sus mejores vinos. Esta costumbre se mantuvo hasta hace unos 50 años; momento en el que se consideró que el roble era un patrimonio que habia que preservar.
 
En una segunda visita por la zona pude localizar un segundo ejemplar de grosor muy similar al primero, aunque quizás algo menos alto. Se encuentra relativamente cerca de Fuente Cardosa, en un sendero que se dirige hacia la ermita de la Virgen de Arroyal.


 
 

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Montacedo!
Soy de Palacios y aunque conozco bien la Dehesa y te podría dar muchos más detalles sobre sus árboles y leyenda me ha sorprendido gratamente la leyenda de fuente Cardosa pues no la conocía! Dónde has leído o escuchado sobre ella? Me gustaría conocerla en detalle! Muchas gracias por escribir sobre Palacios! Espero que lo hayas disfrutado! Un saludo!

Montacedo dijo...

Hola. Los detalles son del libro que cito, que seguro que conoces. Si quieres puedes dejar tus explicaciones aquí como comentario.