miércoles, 6 de mayo de 2015

Regreso a los pueblos del silencio: Ochate

Probablemente sea Ochate, de lejos, el pueblo abandonado de Burgos sobre el que más se ha escrito. No obedece este interés, sin embargo, al propio pueblo, sino a la supuesta leyenda negra que arrastra: epidemias, desapariciones, fenómenos paranormales...; que han atraído hacia el lugar a buen número de visitantes amantes de lo esotérico.
 
No vamos aquí a entrar en detalle en  casa una de estos supuestos hechos, que ya hay suficientes sitios en internet que tratan de ello. Tampoco vamos a entrar a rebatirlos, aunque los análisis serios han mostrado que estas "anomalías" no se han podido demostrar, cuando no son directamente falsas. También es cierto que, en mi opinión, desde el momento en que una persona cree en algo de este tipo, es "en cierta medida" verdadero para esa persona. 
 
A lo que queda de Ochate se puede llegar mediante un bonito y corto paseo desde el pueblo de Imiruri, siguiendo un camino en trance de desaparecer. Aparece recostado en una ladera, junto a un arroyo que ha perdido buena parte de su cauce.  
 
 
Apenas se encuentran algunos muros de sus escasísimas casas.

 
Y lo más característico es la torre de su antigua parroquial, enhiesta y aislada en medio del paisaje. Los creyentes de extrañas teorías ubican en esta torre el centro neurálgico de sus teorías.

 
A escasos trescientos metros, ladera arriba, de Ochate se ubican las ruinas de la ermita de Burgondo, lugar de romería anual (según parece aún se mantiene) de lo pueblos de las cercanías agrupados en cofradía documentada desde el siglo XVII.

 
No voy a negar que el que suscribe sintió cierta inquietud al visitar este lugar, aunque totalmente explicable conociendo lo que se cuenta del lugar y teniendo en cuenta que siempre inquieta visitar en soledad un sitio de este tipo.
 
En realidad el devenir histórico de Ochate se puede explicar de manera mucho más común y similar a la de otros pueblos en situación parecida. En general los núcleos ubicados en lugares apartados, con mala comunicación y escasos recursos siempre se han desarrollado menos, han alcanzado menor población y han sido los primeros expuestos a la despoblación. Desde luego en este blog hay varios ejemplos de este tipo, en los que uno se pregunta, en cierta medida, "a quien se le ocurrió fundar un pueblo aquí".
 
Según parece en Ochate hubo un primer poblamiento altomedieval, para pasar a ser uno de los numerosos despoblados documentados en los siglos XIII y XIV. Sin embargo, el lugar se recupera en el siglo XVI, fruto de su ubicación en un camino que comunicaba con las tierras alavesas. Es en este periodo en el que se produce el mayor desarrollo, coincidiendo con la edificación de su iglesia (la cual, no obstante, tenía bastantes elementos románicos que evidencian un edificio anterior, en especial su portada; que como ya sabemos se encuentra actualmente en Uzquiano).
 
Lo que ayudó al repoblamiento de Ochate fue también lo que causó su eventual desaparición. A partir del siglo XIX se promueve un camino más directo hacia Vitoria que queda bastante apartado de Ochate y que se corresponde con la actual carretera. Poco a poco se va produciendo un lento goteo de emigrantes, en especial hacia el pueblo más cercano, Imiruru. Hacia este pueblo se dirigió el último habitante de Ochate en el año 1934.
 
Durante un tiempo algunos edificios fueron utilizados como corrales. La iglesia avanzó en su ruina, ayudada por el expolio y un incendio.  También hacia Imururi fueron buena parte de sus bienes muebles. Desde la década de los Ochenta se empezó a difundir la imagen de Ochate como lugar de experiencias paranormales, con la presencia de un supuesto ovni. La presencia de algunos desaprensivos junto con a la clásica acaparación de materiales de construcción desde lugares cercanos han hecho que ya sea poco lo que queda ya de sus casas.
 
Para mayor información sobre todo lo relacionado con Ochate basta con buscar por internet. Recomiendo leer especialmente la interesante, amplia y documentada web www.ochate.com. También podéis leer el artículo del siempre recomendable blog de Zález.
 
Aunque, de momento, en esta serie de artículos Ochate es el único despoblado que visitaremos, queremos resaltar que el Condado de Treviño es una de las áreas burgalesas que ha sufrido mayor despoblación. Este efecto ha sido especialmente intenso en las áreas alejadas del cauce del río Ayuda; de modo que se pueden contabilizar hasta 15 núcleos con menos de 10 habitantes, demás de los ya despoblados y abandonados Caricedo y Ochate.

4 comentarios:

ZáLeZ dijo...

Tantas historias y tantos efectos paranormales siempre hacen que la persona que lo visite, se encuentre muy sugestionada y por eso da como un poco yuyu. Reconozco que me cachondeé un poco cuando fui, pero lo que no haría en ningún caso sería ir de noche.
Saludos, y gracias por tu mención.

Montacedo dijo...

Gracias a ti por comentar. Por cierto, te he dejado un comentario en tu artículo correspondiente.

ZáLeZ dijo...

Hola Montacedo:
Ya lo he leído...entonces si lo único raro que ví fue ese canal terroso paralelo al cauce y tiene su explicación , todo resulta normal.

Miguel Cantera dijo...

Un lugar curioso Ochate. Estuve una vez de visita rápida y me pareció un lugar muy inhóspito. Supongo que la sugestión de lo que uno conoce hace mucho jeje. Y es una pena que, como comentas, las zonas de Treviño alejadas del río Ayuda han sufrido mucha despoblación. Afortunadamente la cercanía a núcleos como Miranda o Álava puede hacer que lleguen tiempos mejores. Un saludo!