lunes, 20 de octubre de 2014

Montes de Ayago


Cuando se observa la sierra de la Demanda desde las llanuras de la Riojilla Burgalesa se observan una serie de elevaciones previas conocidas como Montes de Ayago, cuyas cimas no llegan a los 1400 metros. Se trata de una zona muy poco poblada y conocida en donde nos encontramos unos sorprendentes bosques caducifolios. Hoy proponemos una sencilla ruta de aproximación a este espacio siguiendo uno de sus arroyos. Una primera toma de contacto que, vistas las impresiones, probablemente no sea la última.

Dificultad: Media
Orientación (sin GPS con cartografía o track): Buena. Los senderos están limpios y los cruces son claros.
Belleza: Alta
Tiempo y distancia: 3 horas (12 kilómetros)



Situación y acceso

Esta ruta parte del pueblo de Espinosa del Monte. Para llegar al mismo partiremos de Burgos por la N-120. Llegados a Ibeas de Juarros tomamos la carretera regional que conduce a Pradoluengo. Cruzamos toda esta localidad y, justo al final de la misma, encontramos la carretera que se dirige a Fresneda de la Sierra. Unos tres kilómetros más adelante nos encontramos con la carreterita que nos lleva a Espinosa.

Puntos de interés

Hayedo del arroyo de Umbrión. Vistas desde torre de vigilancia. Hayedo de Eterna. Robledales.

Descripción de la ruta

Espinosa es una localidad muy pequeña en donde observamos las características constructivas de la zona: casas de cascajo con entramado de madera. Siguiendo su corta calle encontramos un edificio en buen estado que parece ser de propiedad pública. Bordeándolo por la izquierda entramos en un camino.

Rechazando un primer desvío hacia la derecha llegamos a una zona de pinos de repoblación en donde encontramos una bifurcación. Nosotros seguimos de frente (el regreso se realizará por el otro camino). Caminamos entre tierras de labor, pero de frente observamos una clara elevación, el Umbrión, a cuyos lados se abren sendos barrancos. Todos ellos están cubiertos de un espeso hayedo.

El camino se dirige hacia el barranco de la izquierda, el del arroyo Umbrión, y parece terminar justo al entrar en el bosque. Sin embargo, en realidad se transforma en un claro sendero que se sumerge entre las altas y esbeltas hayas. En principio tendremos el arroyo (que no lleva agua) a nuestra izquierda. Al poco hemos de cruzarlo. Tras dejar atrás un abrevadero (que está al otro lado del arroyo), volvemos a cruzar el cauce e iniciamos un alargado tramo de fuerte ascenso pisando las mullidas hojas.

Durante este tramo cava vez cogemos más altura sobre el cauce del arroyo, el cual a su vez se encajona. Finalmente la pendiente se va suavizando el cauce vuelve a quedar a nuestro nivel. Intuimos ya el final del bosque en las proximidades de un nuevo abrevadero. Aquí volvemos a cruzar el arroyo y salimos a campo abierto. Ha sido un kilómetro largo de hayedo con un desnivel en torno a 200 metros.

El sendero desdibujado finaliza junto a un camino. Tomamos el mismo hacia la derecha hacia la vaguada donde nace el arroyo y ganamos altura por una pradera con un ligero desnivel. Vamos siguiendo este sendero en dirección oeste durante aproximadamente un kilómetro hasta que detectamos una pequeña caseta de vigilancia contra incendios en la zona conocida como "El Cañal". Buscaremos los senderos que nos llevan hasta la misma.

Desde la caseta tenemos muy buenas vistas de la cara norte de la sierra de la Demanda, en la franja entre el pico San Lorenzo y el Pico San Millán. Bajo nosotros tenemos el curso medio del río Tirón, así como la primera localidad que atraviesa: Fresneda de la Sierra. Asomándonos un poco hacia la derecha podemos apreciar la ermita prerrománica de San Vicente del Valle. Hacia el norte, los montes Obarenes y la Sierra de Cantabria.

Tras disfrutar de las vistas volvemos sobre nuestros pasos hasta el punto en que tomamos este difuminado camino; de modo que nos encontramos con una trifurcación. Nosotros seguimos de frente para cambiar hacia la vertiente del río Eterna. El nuevo camino es más claro y desciende paralelo a un nuevo hayedo. Al final del vallejo observamos ya la arruinada iglesia del pueblo de Eterna.

Ya en las proximidades del edificio ignoramos un camino que surge hacia la izquierda y cruzamos una portilla ganadera. Bordeamos la iglesia y descendemos hacia el pueblo, que no presenta un aspecto muy alentador pese a su evocador nombre. Llama la atención el que varios edificios dispongan de antenas parabólicas, posiblemente por una deficiente señal de TV. Justo al llegar a la carretera que conecta este pueblo con el resto de la civilización, tomamos el ancho camino que nace hacia la izquierda.

Hacemos caso omiso de una primera derivación hacia la izquierda y ascendemos suavemente mientras observamos el valle del río Eterna. Poco a poco vamos entrando en un marcado robledal mientras seguimos las distintas ondulaciones del camino. Sin excesivas novedades acabamos llegando a la ermita de la Virgen de los Yermos, que parece más bien un establo ganadero con la tipología constructiva de la zona.

Tras este punto continúa la ascensión. En una bifurcación seguimos por el camino más marcado de la izquierda y por fin llegamos a una pista más ancha junto a un pinar. Tomamos la misma hacia la izquierda empezando un tramo de mayor pendiente. Poco a poco los robles vuelven a sustituir a los pinos y acabamos llegando a un depósito de agua que a su vez nos devuelve al valle del arroyo Umbrión. El desnivel entre Eterna y este punto es de unos 100 metros.

Bordeamos el depósito por la izquierda y comenzamos un descenso por un bosque en el que se mezclan hayas y robles. En las partes abiertas vemos ya el pueblo de Espinosa y el valle del río Tirón. Poco a poco los robles (algunos de gran porte) van sustituyendo a las hayas mientras también tenemos buenas perspectivas del hayedo que recorrimos al principio del trayecto. Pronto salimos del bosque y ya sólo nos queda cubrir el kilómetro que nos separa de Espinosa.

Comentarios

Ruta bastante sencilla que además se puede acortar el enlace hasta la caseta de vigilancia con lo que quedaría reducida a unos 10 kilómetros. Preferible realizarla en otoño (finales de octubre - principios de noviembre).

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Track de recorrido (pulsa en el círculo verde para más información)

Vídeo con imágenes del recorrido.

6 comentarios:

nano dijo...

Bonita ruta.No hace mucho hicimos una por esa zona bajando por San Vicente del valle y me parecio preciosa.Buenas fotos.

Viajes y Rutas dijo...

Dificultad alta entonces por que? Por la elevación?
Un saludo
Carmen

Montacedo dijo...

Hola. Quizás debería haber puesto dificultad baja en lugar de media. Ese día había hecho otra caminata antes y estaba u n poco cansado. Un saludo.

Vitor dijo...

La ermita de los Yermos como la de la Trinidad en Avellanosa, realmente como dices parecen corrales. Pero su encanto está en que asi y hoy y ahora podemos vrr cómo eran los templos religiosos antes de las "moderneces" del románico. Ese es su encanto...

Vitor dijo...

Ambas en los Montes de Ayago, que son un ejemplo de fortaleza natural frente a las invasiones que se producian en los llanos. Por eso la historia de los Montes dr Ayago está antes de la pacificacion que se produjo al inicio del Camino de Santiago... Son montes de acceso duro al principio, luego ya arriba son casi llanos, con dehesas.... Son balcon ante la Rioja y la Bureba al norte, y a su Sur la Sierra de la Demanda. Fueron un refugio natural muy bien dotado para la supervivencia

Montacedo dijo...

Gracias por comentar.