jueves, 28 de septiembre de 2017

Pueblos de la despoblación: Avellanosa de Rioja

De los pueblos con arquitectura popular de interés dentro de la provincia, sin duda Avellanosa de Rioja es el menos conocido. A ello contribuye sobremanera su apartada ubicación en un apartado confín de los Montes de Ayago, dentro de la parte de la Sierra de la Demanda lindante ya con La Rioja, y que su mejor acceso sea una larga pista forestal que por momentos se interna en la citada comunidad vecina.

Situación de Avellanosa de Rioja en el valle del río Reláchigo. Robledales de roble rebollo, que al ganar altura son sustituidos por hayedos y pinares de repoblación, cubren las empinadas laderas que rodean el pueblo. Según parece estas actividades de repoblación llevadas a cabo por el ICONA fueron uno de los acelerantes en el proceso de emigración, al reducir la extensión de pastos disponibles.
 
Avellanosa de Rioja presenta uno de los conjuntos tradicionales urbanos mejor conservados de la provincia de Burgos. Unido a Eterna, que a su vez es pedanía de Belorado, el pueblo que está situado en un estrecho valle abierto por el rio Reláchigo. Tradicionalmente agrícola y ganadero, llegó a tener 50 habitantes en el primer tercio del siglo XX, pro fue paulatinamente abandonado desde los años sesenta.
 



Pese a ello, los hijos de Avellanosa, y algunos neorurales que se han instalado en el lugar los últimos años, se han preocupado de impedir que, como ha sucedido en muchos otros casos, la ruina se apoderase de la localidad. Pero el hecho definitivo fue la llegada al pueblo de un ermitaño (Fray Ramón) que hasta su muerte, se preocupó de cuidar el caserío y de mantener abiertas sus calles y caminos.



De esta forma, hoy día presenta una fisonomía urbana que lo distingue de la práctica totalidad de los pueblos burgaleses. Sus casas responden al modelo más primitivo de vivenda popular imperante en la comarca del alto Tirón. El elemento constructivo protagonista en Avellanosa es el entramado de madera, relleno de adobe y en algunos casos, con ladrillo de tejar. 

 
 
 
Todas las edificaciones cuentan con un zócalo ejecutado con cantos rodados y están cubiertas con tejados a dos aguas, que además presentan amplios aleros con canes de madera trabajados y tallados. En agosto se celebra su fiesta principal en la Ermita de la Trinidad, aunque originalmente tenía lugar a finales de septiembre, en agradecimiento por las buenas cosechas de antaño.
 


Seis personas están empadronadas en Avellanosa, de acuerdo con los datos de 2016. Su despoblación temporal ha hecho que hayan desaparecido como entidad menor, dependiendo de la también menguada localidad de Eterna, y a su vez del Ayuntamiento de Belorado. Esta situación dificulta aún más la puesta en marcha de iniciativas en la localidad (Eterna queda a casi 30 kilómetros de distancia por carretera y pista). En repetidas ocasiones los vecinos han intentado revertir esta situación y constituirse de nuevo como Junta Vecinal para poder sacar un rédito de su amplia superficie rústica, que sería invertido directamente en el pueblo. 


La niebla empieza a cubrir Avellanosa de Rioja a medida que nos alejamos, como si quisiera mantener oculto su secreto.

Aunque acabamos de indicar que el recorrido en vehículo entre Eterna y Avellanosa implica un buen número de kilómetros, existe la alternativa de realizar ese trayecto por senderos montaraces. Se trata de un sencillo y bonito recorrido senderista, especialmente interesante en época otoñal, y que describiremos en el próximo artículo.

Más información en los siguientes enlaces:

Extenso y detallado artículo sobre cómo era la vida en este pueblo en el excelente blog “Los pueblos deshabitados” (destaca la participación como informante de Nati San Martín)

Asociación de vecinos y amigos de Avellanosa de Rioja 

También le dedican varios artículos en el blog “Redecilla, calle y camino”, destacando también los recuerdos y poesías de Nati San Martín.

1 comentario:

Vitor dijo...

Gracias, Javier, un buen artículo sobre la siempre necesaria Avellanosa de R., que a pesar de sus pérdidas de población ha tenido gentes, ilusión y esfuerzo para reinventarse, pervivir, y asi convertirse en un museo en vivo de una forma de vida que da margen a otras formas de vida más actuales.