martes, 9 de noviembre de 2010

Un particular recorrido por la cuenca del Úrbel (y XII): Palacios de Benaver

En realidad esta localidad no se encuetra en la cuenca del Úrbel, pero al tratarse de un lugar apartado de otras rutas he decidido incluirlo aquí, casi a modo de epílogo. Por cierto en la antiguedad su ubicación era más estratégica, como lo demuestra la existencia de una antigua calzada romana en sus cercanías.

El nombre podría provenir de un antiguo mozárabe de nombre Ben Aber. La iglesia de San Martín data de finales del románico, si bien no presenta especial interés.

En realidad el principal motivo para acercarse a este lugar es el monasterio de monjas benedictinas de El Salvador, que se ubica en las afueras del pueblo.

De aquí me voy a Palacios
y allá en un barrio chiquito
hay un convento de monjas.
Religión de San Benito.

No está clara la época de su fundación, algunos le atribuyen gran antigüedad. Al respecto en una tabla del monasterio se recoge una leyenda referida a la pérdida de la nariz de las 300 monjas existentes en en el cenobio en la época de razzias musulmanas, aunque no está claro si se trata de un martirio o de una automutilación para evitar su violación.


La historia se retrotraería, en todo caso, al año 834, y el protagonista sería el mismo caudillo moro Zefa que el día 6 de agosto de ese año había degollado a doscientos monjes en San Pedro de Cardeña. Tras la cruel profanación el monasterio habría quedado desierto durante 150 años hasta que el Conde Garci Fernández, gracias a un hallazgo milagroso del Cristo crucificado (aunque el que se conserva es de época algo posterior) decidiera su reconstrucción en el año 968, siendo su primera abadesa Dóña Urraca, una pariente suya.

Lo que sí está documentado es que en el año 1231 el convento dependía del obispado de Burgos y sus principales benefactores fueron los miembros de la poderosa familia de los Manrique de Lara, estando ya ocupado por monjas benedictinas.


La iglesia actual es de estilo gótico mientras que el resto del monasterio corresponde a los siglos XVII y siguientes. Entre el arte mueble es preciso señalar la auténtica joya que constituye un gran cristo románico del siglo XI (el cristo de los Ojos Grandes), restaurado en 2007, y varias estatuas yacentes esculpidas en madera que adornan los sepulcros góticos de varios miembros del linaje de los Lara. En la clausura se guarda una delicada figura de marfil, de la primera mitad del siglo XIV, que representa de forma naturalista a la virgen con el niño de pie sobre sus rodillas.

Foto talla del cristo: Fundación Patrimonio Histórico de Castilla y León.

Para saber algo más del monasterio, podéis consultar su página web.

1 comentario:

Amador dijo...

Hola Montacedo , mi pueblo esta a 3km de palacios de benaver y el monasterio es sin duda una de las joyas de la zona . Un saludo .