De aquí me voy a Mansilla,
parecen ricos y no lo son.
Porque la hacienda que tienen,
no es de ellos que es de Jalón.
parecen ricos y no lo son.
Porque la hacienda que tienen,
no es de ellos que es de Jalón.
En este pueblo señores
hay labradores muy buenos
y a la vuelta de ocho días
se encuentran de jornaleros.
hay labradores muy buenos
y a la vuelta de ocho días
se encuentran de jornaleros.
para contemplar el único resto románico de su iglesia, de gustos lombardos.
y seguimos por la carretera que conduce a Pedrosa de Río Úrbel (cometiendo el pecado, que esperamos corregir en el futuro, de no entrar en Lodoso).
Pedrosa tiene un perfil alargado y un tamaño relativamente grande (no en vano es cabeza de ayuntamiento). Fue cuna del ilustre estudioso de la historia medieval castellana Fray Justo Pérez de Úrbel (sin querer entrar en su perfil político).
Pero la única parada la vamos a hacer en una curiosa edificación que se erige en las afueras del núcleo: una portada aislada que no conduce a ninguna parte.
Según nos cuenta Elías Rubio en su blog, la configuración actual del lugar tiene apenas unos tres años de existencia, y se debe a un vecino que con la misma quiso rememorar una antigua ermita existente en el lugar, usada parcialmente como cementerio por varias generaciones. Recuerdo muy vagamente un artículo sobre el lugar de Eduardo de Ontañón publicado en el libro Estampa, con un regustillo un tanto macabro.
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