Cada cien años se abre el arca con las reliquias de San Vitores

Hace un año largo, concretamente el 2 de septiembre de 2017, tuve la oportunidad de asistir a un acto que no se puede calificar de otra forma que EXTRAORDINARIO: la apertura del arca con las reliquias de San Vitores. Cuando menos porque, dado que la tradición indica que este rito sólo puede tener lugar cada 100 años, es seguro que la inmensa mayoría de los que estábamos allí, así como de aquellos que puedan leer estas líneas, no tendremos ocasión de volver a verlo.

Espectacular emplazamiento del santuario. Al fondo la sierra de La Demanda

San Vitores fue un santo que vivió en el siglo IX y cuya hagiografía, mucho más legendaria que la de la mayoría de los santos, se relaciona mucho con el periodo de dominación musulmana de la península. Se le representa a menudo con la cabeza entre las manos, simbolizando la creencia de que siguió predicando después de torturado y decapitado. 

Imágenes del traslado. Los danzantes y la preciosa urna

Su advocación, aunque no muy frecuente, se encuentra bastante extendida en el norte peninsular, especialmente en Burgos y en zonas aledañas al camino de Santiago. Se concentra su devoción en su patria chica, Cerezo de Rio Tirón, y en los pueblos de la cuenca media de río Tirón que celebran romerías tanto de manera individual como colectiva, agrupados en la Asociación “Pueblos de San Vitores”. En todo caso, tengo previsto escribir algo más sobre este santo en el futuro.

Arca recién abierta. Obsérvense al fondo las custodias-relicario

La tumba originaria de San Vitores estuvo en una gruta del propio Cerezo, pero en el siglo XV los Condestables de Castilla promovieron la construcción de un convento en un lugar preeminente entre las localidades de Cerezo y Fresno de Rio Tirón. De hecho en este edificio, al que dedicamos un artículo hace algún tiempo, está plagado de simbología de la familia Velasco. Los restos del santo se encuentran un arca más antigua, que pudiera datar del mismo siglo XV, que a su vez se guarda en una urna de mayor tamaño fechable en el XVI. 

Detalle de custodia-relicario con (supuestos) restos del santo.

En buena medida para proteger los propios restos, está establecido que el arca sólo se pueda abrir cada 100 años, habiendo correspondido hacerlo en el año 2016. No obstante, en ese año el convento o santuario se encontraba en pleno periodo de reformas tras muchos años de semiabandono, de modo que se decidió retrasar la ceremonia un año más. La principal entidad impulsora tanto de los arreglos del edificio como de los propios actos del centenario ha sido la propia Asociación de Pueblos de San Vitores.

Los mozos y las mozas se recuperan de los bailes contemplado el amplio paisaje

Al evento acudieron varios centenares de personas, entre ellos las autoridades y danzantes de los pueblos del entorno. También algunos representantes de pueblos que tienen como patrono a San Vitores. El arca fue trasladada a una explanada en el páramo que domina buena parte del valle del río Tirón. Allí, se procedió a la apertura propiamente dicha (ante notario) y a la celebración de una misa amenizada por el grupo Caput Castellae. 

Terminada la celebración, el arca fue trasladada al interior del convento en donde cada uno de los asistentes tuvimos la oportunidad de contemplar unos segundos el interior del arca. Se pregunta uno ¿Se esperará a abrir el arca a 2117? ¿Quiénes estarán para hacerlo? ¿Qué tipo de sociedad y cultura habrá en aquel momento?.

Termino el artículo con un pequeño vídeo en el que quizá se percibe más el ambiente del evento.