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miércoles, 14 de abril de 2021

Un emprendedor en las Loras Burgalesas

Hoy voy a dedicar el artículo a un personaje que tuvo mucha influencia en esta comarca de Burgos durante la primera mitad del siglo XX; una persona de la que hasta hace poco no tenía noticia; no sé si por mi ignorancia o por haber caído su historia en el semi-olvido.  

Casa familiar en Rioparaiso y finca aneja, que se extiende bastante hacia el lado ziquierdo. En el centro de la foto se aprecia la parte alta del monolito en recuerdo de nuestro protagonista. Foto tomada desde el campanario de la iglesia.

Don Angel García Vedoya (o Bedoya), nació en el pequeño pueblo de Rioparaíso a finales del siglo XIX. Su padre era médico y natural de Tablada del Rudrón, de donde también era oriundo el también médico y relativamente afamado Missael Bañuelos, que parece mantuvo relación de amistad con Ángel. Su madre era originaria de Rioparaíso, en donde la familia disponía de una casa solariega e incluso contaba con una capilla en la iglesia.

Escudo familiar en una capilla de la iglesia
 

Ángel estudió la carrera de Ingeniería de Caminos y Puertos en Madrid, obteniendo el título en 1921 siendo el número uno de su promoción. Apenas acabada la carrera como ingeniero de caminos, canales y puertos, su vida se derivó hacia la política. En julio de 1928, durante la dictadura de Primo de Rivera, acaba obteniendo el cargo de alcalde de la ciudad; puesto que ocupará hasta la desaparición de la dictadura.  


Las reseñas que encontramos de entonces resaltan su buena gestión, aunque dado las posiciones extremas de aquel entonces es difícil asegurar hasta qué punto responden a la realidad. Políticamente perteneció al partido Unión Patriótica. Siempre llevó a gala sus tendencias conservadoras y su ferviente catolicismo practicante.  


Los dos escudos de la fachada. En este segundo, probablemente reubicado, llama la atención de una representación de ruedas de carro de tipo antiguo o "chillón", sin giro independiente del eje. Estuvo extendido en amplias zonas de España; pudiendo verse aún en la cornisa norte aún algunas ruedas de este tipo.

Lo cierto es que en el periodo que ocupó la alcaldía de Burgos tuvo numerosas iniciativas e hizo numerosas propuestas que, además, se llevaron a la práctica, entre ellas: Propulsor de la municipalización del abastecimiento de agua a Burgos, potenciar el desarrollo de las nuevas asociaciones culturales, deportivas y artísticas, fomento del turismo, impulso del sanatorio antituberculoso, fomento de las obras del Santander-Mediterráneo, apertura del mercado de abastos de la zona sur, actualización en el registro de la propiedad de todos los bienes municipales, terminación del proyecto de encauzamiento del río a su paso por Burgos e impulso del embalse del Arlanzón, además de un largo etcétera.  

Puerta de acceso al jardín, proveniente de la iglesia de un despoblado cercano ya desaparecido
 

Con la caída del General Primo de Rivera quedó destituido de su cargo de alcalde y concejal de manera fulminante, regresando a su trabajo de ingeniero hasta que en 1931, con la caída de la monarquía, se presentó con el Partido Agrario a las elecciones para diputado en Cortes, y fue elegido en segunda vuelta. Ocupará dicho cargo hasta 1936.  

Durante el tiempo que ostentó el cargo de diputado defendió diversas iniciativas como la construcción de un pantano en la cabecera del río Odra, y la toma de una decisión definitiva sobre el pantano de Retuerta. Realizó una proposición de ley relacionada con la declaración por parte del Congreso de considerar como prioridad estatal el abastecimiento de aguas y saneamiento de los poblados rurales, argumentando que, aunque las medidas en vigor estaban traspasadas a los ayuntamientos, estos carecían o de los recursos o de las iniciativas para acometer esta clase de obras, que suponían una mejora en la calidad de vida de los pueblos.  

Angel García Vedoya se trasladó a Madrid tras no resultar reelegido en 1936. Cabe decir que, pese a sus ideas conservadoras, fueron sus planteamientos moderados los que le generaron muchos enemigos entre la derecha y contribuyeron en buena medida a dicha derrota. De poco le ayudó esto en el momento clave; iniciada la contienda acabó siendo fusilado en noviembre de 1936 en el aciago lugar de Paracuellos del Jarama.  


Dos vistas del antiguo molino y central hidroeléctrica de Amaya.

 Su hermano Enrique, en 1939, solicitó al Ayuntamiento de Burgos que se facilitase una cantidad de piedra para la construcción de un monumento a la memoria de Ángel en el jardín de la casa de Rioparaíso, a lo que se accedió. Este monumento hoy perdura. El Ayuntamiento de Burgos en pleno, el 18 de agosto de 1960, le dedicó en la ciudad una calle denominada calle de Ángel García Vedoya (en la placa de la calle figura Bedoya).  

Foto del día de la inaguración. En la franja central se lee "Hidroelectrica Peña Amaya. Harinas García Vedoya Hnos". Fuente: sandovaldelareina.com

 Durante su vida política no se olvidó de la comarca que le vio nacer. Además del proyecto que se ha comentado de la presa del alto Odra, gracias a su trabajo se construyó la carretera de enlace entre Humada y Valdelucio, amén del enlace a su pueblo natal, y promocionó el abastecimiento de agua y luz a los pueblos de la cara sur de Peña Amaya. Se conservan placas conmemorativas al menos en Sandoval de la Reina y Los Barrios de Villadiego.  


Canalización y depósito para la recogida de aguas en la zona intermedia o "cincho" de Peña Amaya. Nótese la caída existente hasta el fondo de la llanura.

 Para este último proyecto se embarcó en dos actuaciones realmente innovadoras para la época: construir sendas centrales hidroeléctricas en Amaya y Villamartín de Villadiego; recogiendo el agua de los arroyos de la altiplanicie y aprovechando la gran caída existente merced a depósitos de almacenaje y tuberías de gran longitud. Fueron inauguradas en 1922, al poco de acabar su carrera universitaria.  


Antigua Central hidroeléctrica de Villamartín de Villadiego, al pie de Peña Amaya. Algunos equipos ubicados en el exterior del edificio
 

Los edificios, que aún se conservan aunque modificados y convertidos en viviendas particulares, funcionaban como molinos harineros durante el día y por la noche llevaban una exigua luz a los pueblos, pero que resultaba un paso fundamental respecto a toda una eternidad de oscuridad de la vida cotidiana nocturna. 

Placa de agradecimiento en Los Barrios de Villadiego. Fuente: Sandovaldelareina.com
 

Algunas de estas cosas me contó un vecino de Rioparaíso, que también me dijo que ahora la finca está semiabandonada y que en su juventud pudo ver muchos documentos con los proyectos realizados o ideados por “don Ángel”. También me comentó que su hermano también fue muy querido en la comarca ya que ejerció como médico rural hasta los años sesenta del pasado siglo. 

La fuente principal para la elaboración de este artículo ha sido la página web www.sandovaldelareina.com. Pulsando en el enlace encontraréis más información; incuyendo una interesante entrevista a una persona que trabajó en la Central de Amaya.

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