Este edificio, que se encuentra en la vertical de Toba de Valdivielso, casi en la culminación hacia el páramo, es lo que queda de la ermita de San Jorge, y pasamos junto a ella en la ruta descrita en nuestra anterior entrada. Como ocurre con la ermita de San Cristóbal, de la que hablamos hace ya algún tiempo, parece estar ubicada en un lugar con grandes perspectivas sobre el valle.
Tal y como podemos descubrir en el libro "Patrimonio Etnográfico del valle de Valdivielso", como en el caso de la ermita de la Virgen de la Hoz, hasta aquí también se ascendía con ocasión de la festividad del Santo, el 23 de Abril, tanto desde Toba de Valdivielso como desde Santa Olalla; y es que la festividad correspondía alternativamente a un pueblo y otro.
Hace ya unas cuantas décadas que la celebración tiene lugar en el llano, al parecer a medio camino entre ambos pueblos, mediante un acto en el cual se transfiere la imagen. Se entonan entonces los siguientes versos:
Que es aquello que reluce,
detrás de las campanas.
Es el santo San Jorge
que se va para su casa
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja aquí tu comentario