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miércoles, 8 de abril de 2015

Sendero GR99 por Burgos (Etapa 11): Baños de Sobrón –Miranda de Ebro


En el comienzo de esta etapa el Ebro abandona las hoces de Sobrón para entrar en el área más reposado de su discurrir por Burgos: la llanada de Miranda de Ebro.
 
Dificultad: Baja
Orientación (sin GPS con track o cartografía): Media. Hay bastantes cruces en los que resulta poco evidente la dirección a tomar.
Belleza: normal.
Tiempo y distancia: 5 horas (20 kilómetros)
 

 


Puntos de interés
 
Tramo final del desfiladero de Sobrón. Iglesia de Montañana. Vistas hacia la sierra de Cantabria.
 
Descripción
 
Desde el aparcamiento de dos plantas en donde acabó la anterior etapa descendemos hasta llegar llegamos al puente decimonónico que es el principal rastro de la actividad del antiguo balneario. Pasado el mismo entramos de nuevo en el lado burgalés del Ebro, que a partir de aquí sirve de límite provincial con Álava.
 
Inmediatamente encontramos una fuente-manantial defendida por una reja modernista; ambos con evocaciones románticas y decadentes. Esta fuente, la fuente de la Salud, tiene aguas bicarbonatadas sódicas. En el pasado formaba parte de las instalaciones del antiguo balneario de Sobrón, ubicado en la parte alavesa del río.
 
Minutos después seguimos un gran meandro y llegamos junto a una dorsal rocosa que se interna hacia el río. Continuamos bajo la misma y llegamos junto a los edificios de un antiguo molino, el punto en donde acaba el desfiladero. Giramos hacia la izquierda buscando este edificio, junto al que se encuentran un par de mesas adecuadas para el descanso. Comienza aquí un camino más ancho pero maltratado que asciende un poco y termina desembocando en una pista asfaltada que seguimos.
 
Estamos entrando en la llanada de Miranda de Ebro, dejando atrás los relieves de la Sierra de Árcena. No obstante en esta primera zona aún encontramos bastantes bosquetes, especialmente de robles, que alternan con los campos de cultivo, muchas veces de regadío.
 
La pista afronta un ascenso largo pero llevadero alejándose del río y sin mayores novedades alcanza el pueblo de Villanueva Soportilla. Éste y los siguientes pueblos que nos quedan antes de llegar a Miranda no tienen grandes elementos patrimoniales, aunque sí conservan interesantes entramados de calles bastante bien cuidadas y con algunas casas solariegas.
 
Seguimos la calle que continúa desde la pista asfaltada durante unos metros hasta que de manera natural desembocamos en una calle perpendicular que nos saca del pueblo, dejando a un lado una moderna bolera y un lavadero. Al poco de salir del pueblo llegamos a un cruce en el que seguimos recto.
 
Entramos así en un camino ancho y relativamente cómodo, aunque con algo de piedra suelta. Con cierta tendencia descendente vamos dejando atrás campos de cultivo salpicados aquí y allá de rodales boscosos. Ignoramos varias derivaciones hacia la izquierda (la segunda de ellas conduce, en kilómetro y medio, a la interesantísima necrópolis altomedieval de Santa María de Tejuela).
 
Desembocamos así en la carretera Ameyugo-Orduña, que tomamos hacia la derecha (si la tomáramos hacia la izquierda entraríamos en la variante 11.1 de este tramo). La seguimos unos cientos de metros. Nada más dejar atrás la carretera que conduce a Villanueva Soportilla encontramos en el lado izquierdo un camino no demasiado definido que tomamos.
 
El camino nos acerca rápidamente a la vera del río y empieza a transitar paralelo al mismo. Pronto se transforma en una bonita y sombreada senda de unos centenares de metros de longitud. Finalmente una tierra de labor se sitúa entre el Ebro y la senda, al tiempo que esta última gana algo de altura y desemboca en un camino.
 
Tras superar una corta rampa el camino pasa a llanear mientras observamos muy cerca el pueblo de Guinicio. Mientras, al otro lado del río detectamos las características torres del pueblo alavés de Fontecha. Entramos en Guinicio junto a su iglesia, la cual bordeamos para bajar por su calle principal y torcer de manera natural hacia la izquierda saliendo del pueblo.
 
Hemos entrado en un camino de concentración. Tras una corta bajada llegamos a un cruce en el que giramos hacia la derecha, ascendemos y desembocamos en el pueblo de Montañana, a la vez que la carretera que cruza la localidad. En el lugar lo más destacado es su iglesia románica. Seguimos la carretera pero en una zona de ascenso y a la altura de la última casa del pueblo tomamos un camino que nace hacia la izquierda.
 
Tras llanear un poco tendemos a descender. Desde este punto tenemos una vista más abierta del Ebro, gracia a la cual observamos como su cauce es cada vez más ancho. Girando hacia la derecha pasamos una zona de antiguas canteras en donde ahora se desarrollan unas lagunas artificiales y volvemos a la carretera a la altura de una empresa dedicada a dicha actividad. Nada más pasar la instalación escogemos un camino que nace en el lado derecho.
 
Tras ascender un poco entramos en una zona muy despejada. Ello nos permite tener una amplia panorámica de la sierra de Cantabria. En suave descenso y tras ignorar un primer cruce llegamos a un punto de obligado giro. Lo hacemos hacia la izquierda. Ascendemos un poco para descender a continuación, maniobra que nos conduce al pueblo de Suzana.
 
A la altura de las primeras casas giramos hacia la derecha de modo que nos situamos paralelos a la carretera. Pasamos junto a la iglesia y otras bonitas edificaciones y de manera natural salimos del pueblo por otro camino similar a los anteriores. Desde aquí el paisaje sigue bastante despoblado de arbolado. Ignoramos las desviaciones y llegamos a una nueva zona de antigua extracción de arena concluyendo el camino en una carretera en el punto en el que la misma supera la autopista AP-1.
 
Desde este punto seguimos la carretera hasta Miranda. Para ello nos incorporaremos antes a la carretera que viene de Suzana y Montañana. A partir de entonces seguimos recto hasta la entrada en la ciudad. Tras dejar a un lado unas instalaciones deportivas llegamos al paso inferior bajo la N-I. Antes de cruzar el mismo giramos hacia la izquierda (es dirección prohibida para los vehículos) y atravesamos otro paso inferior junto al río.
 
Acabamos de entrar en tramo urbano del Ebro a su paso por Miranda, caracterizado por la existencia de varios robustos puentes. Tenemos la posibilidad de seguir los paseos más cercanos al río o mantenernos en la parte más alta siguiendo las calles paralelas al río. Miranda tiene varios puntos de interés que nos son objeto de esta crónica.
 
Comentarios
 
Etapa sencilla y un tanto monótona (sin duda la menos interesantes de todo el GR99 burgalés). Se recomienda hacerla con bici (que es lo que hice yo) al menos a partir del molino arruinado de Villanueva-Soportilla. En este caso quizás lo mejor es seguir la carretera desde Guinicio hasta Miranda. En cualquier caso habrá que tener precaución por el tránsito de camiones que entran y salen de la cantera.

NOTA ESCRITA EN 2016: EL PUENTE DECIMONÓNICO DEL INICIO DE LA RUTA HA SIDO DESTROZADO POR UNA RIADA. NO TENGO CONSTANCIA DE QUE VAYA A SER REPARADO. TAL VEZ SEA FACTIBLE CRUZAR ANTES DE SOBRÓN A TRAVÉS DE LA PRESA DEL EMBALSE.

Aunque la orientación es relativamente sencilla, como es habitual en las zonas más abiertas la señalización tiende a desaparecer. Como se ha apuntado, esta tiene la alternativa de la variante 11.1, que transita por la orilla alavesa del río.
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Track del recorrido (pulsa en el círculo verde para más información)



Vídeo con imágenes del recorrido
 

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