lunes, 21 de abril de 2014

La Función del Judas en Villadiego

El pasado sábado me desplacé a la villa de Villadiego a ver parte de los actos de la llamada Función del Judas. Empieza esta crónica con la revista de las tropas en la Plaza Mayor. Aquí el ejército rojo.
 


El ejército azul.


 
Los "Miñones", que junto a "Los Cadenas" representan al pueblo, y que serán también los que oculten al "Judas".

 
El ejército amarillo, que ameniza con su música el acto.

 
A continuación el Rey pasa revista de las tropas

 
Seguidamente el representante de "los miñones" pasa a comunicar al Rey las peticiones del pueblo, que intentan pegarse a la realidad manteniendo un tono jocoso.
 

 
El Rey se niega a las peticiones y los Miñones se declaran en rebeldía. El Rey entonces decreta atacar a los "Miñones" y capturar al "Judas". Las tropas se desplazan al lugar donde se desarrollará la batalla.

 
Últimas negociaciones con los sublevados, que se desarrollan en el puente medieval.

 
las negociaciones no tienen éxito. El Rey y sus ayudantes cruzan el río hacia el alto de La Riba.

 
Los ejércitos toman posiciones. Los Miñones en lo alto y las tropas del Rey en la base.

 
Fragor de la batalla







 
Los "Miñones" son derrotados y "el Judas" capturado

 
Regreso de las tropas a la Plaza Mayor

 
"El Judas" a buen recaudo.

 
En la Plaza Mayor tiene lugar el juicio al Judas. Recitan sus alegatos el Fiscal, el abogado defensor e incluso la madre de un Judas cuyos pecados están más bien relacionados con el "mal vivir".

 
Finalmente "El Judas" es condenado. Será quemado en la hoguera al caer de la noche y tras la distribución de un aperitivo entre los asistentes.
 
 
Como observamos la fiesta del Judas es una festividad de interpretación algo compleja y de orígenes inciertos mezclando, como suele ser habitual en estos casos, elementos muy dispares. La trama principal parece estar relacionada con un alarde o desfile militar, tal vez en recuerdo de alguna batalla, combinado con ritos carnavalescos en los que la condena y quema del Judas equivaldrían a la purificación de los pecados de la comunidad.
 
Esta fiesta parece tener al menos tres siglos de actualidad y se celebraba, con elementos muy similares a esta fiesta de Villadiego, en varias localidades de la provincia (incluida la capital). En algunos casos se limitaba a la "quema" propiamente dicha, como aún ocurre en Trespaderne. Entre finales del siglo XIX y principios del XX fue desapareciendo en parte por los gastos que ocasionaba y en parte por imposición de las autoridades eclesiásticas.
 
Desde 2002 la fiesta se recuperó en Villadiego.  Es de ensalzar el esfuerzo que implica reimplantar esta tradición, aunque en mi opinión aún se echa en falta un poco más de rodaje para mejorar la puesta en escena.

1 comentario:

Miguel Cantera dijo...

Bonito espectáculo, gracias por el reportaje Montacedo.